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El Hospital de Especialidades Guayaquil ‘Dr. Abel Gilbert Pontón’ desde el 2011 cuenta con el servicio de Angiografía, mismo que inició sus actividades con un angiógrafo digital y pertenecía a Imagenología, pero en abril del 2013 se independizó, consolidándose de esta forma como servicio de “Hemodinamia, Angiografía e Intervencionismo Endovascular” con un enfoque de subespecialidad que brinda soporte en diagnósticos y terapéutica a otras especialidades y subespecialidades.

El servicio ha pasado por varios adecentamientos de infraestructura, la más significativa fue la realizada este 2018, puesto que estas mejoras facilitan la reorganización de los flujos de pacientes, personal, insumos, mejor manejo de dispositivos médicos utilizados y procesamiento de materiales, cumpliendo de esta forma con estándares de calidad internacionales.

Cuando la institución se preparó para la Acreditation Canada en el 2016, el área desarrolló procedimientos y protocolos en todos los procesos internos y macroprocesos institucionales, adicionalmente, cabe recalcar que el reprocesamiento de materiales endovasculares, se maneja estrictamente bajo procedimientos controlados por el departamento de Calidad.

Carlos Soledispa, cardiólogo subespecializado en hemodinamia, angiografía y cardioangiología intervencionista, es el responsable de esta área y comentó que ´´el HAGP es el único hospital del Ministerio de Salud Pública (MSP) en la región Costa que cuenta con una sala de Hemodinamia, por tal razón, se beneficia a una población superior a 5 millones de habitantes que requieren cateterismos y procedimientos endovasculares, de la misma manera, se recibe pacientes de todas las provincias de la costa, de las islas Galápagos e incluso de provincias del austro ecuatoriano, así como también de otras instituciones por medio de la Red Pública Integral de Salud´´.

Hemodinamia no solo ha innovado su infraestructura, también ha repotenciado su tecnología, puesto que cuenta con un angiógrafo digital de última generación, polígrafos, equipo de soporte con balón de contrapulsación intraaórtico, inyector de contraste a alta presión, ecografía intravascular (IVUS), navegador cardíaco, ecografía intracardiaca, entro otros, convirtiéndose así, en la sala de la más alta tecnología en cateterismos y procedimientos intravasculares en todo el país. Además, cuenta con tres cardiólogos subespecialistas en hemodinamia e intervencionismo endovascular y se brinda soporte a electrofisiología, ya que la institución cuenta con un cardiólogo subespecializado en esta rama.

Debido al fortalecimiento paulatino que ha recibido esta sala, cuyo enfoque desde su origen ha sido cubrir en gran cantidad procedimientos endovasculares a beneficio de la ciudadanía, ahora es posible realizar intervenciones mínimamente invasivas de las cuales podemos señalar las más frecuentes como: las angioplastias coronarias, tratamientos neuroendovasculares como embolización de aneurismas cerebrales con coils, tratamiento de malformaciones arteriovenosas con sustancias embolizantes, angioplastias de miembros inferiores, tratamiento de aneurismas aórticos tanto en tórax como en abdomen, colocación de catéteres de diálisis permanentes y translumbares, flebografías, embolización de tumores, entre otros; además, se incluyó procedimientos de ablación de arritmias cardiacas por parte de electrofisiología.

´´Por la ampliación de cobertura se ha logrado reducir transferencias a prestadores externos al igual que la lista de espera de procedimientos endovasculares, ahora se realiza entre 100 a 120 por mes, el ahorro al sistema de salud es muy grande, por ejemplo, en una angioplastia coronaria se genera un ahorro estimado de $5.000, por embolización cerebral, $7.000, en cada procedimiento de menor complejidad, percibimos un ahorro de $2.000, individualizando el incremento de valores generados por módulos de internación en unidades críticas en servicios privados de asistencia médica, actualmente sumamos 2410 intervenciones´´, así los explicó Soledispa.

Estas intervenciones, por ser consideradas mínimamente invasivas, son muy ventajosas para los pacientes, ya que la recuperación postprocedimiento es casi inmediata, con la posibilidad de deambulación y realización de todas las actividades normales a partir de las 48 horas; además, el paciente se ve beneficiado al no cursar postoperatorios prolongados y cirugías consideradas mayores (de corazón, de cerebro, de la arteria aorta). Para la institución existen muchas ventajas, ya que hay una resolución más rápida de los pacientes, menor estadía y gastos hospitalarios, menor tasa de infecciones nosocomiales (IAAS), menos días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y unidades críticas, menor número de referencias, esto como principales indicadores.

Otro dato importante del servicio es que ha prestado apoyo endovascular a varias especialidades como cardiología, neurología, neurocirugía, cirugía vascular, urología, nefrología, gastroenterología, oncología, neumología y otras, obteniendo así, la posibilidad de dar tratamientos mínimamente invasivos acorde al desarrollo de la medicina moderna en todas las ramas y subespecialidades; adicionalmente, cabe mencionar que el aporte y compromiso de la institución hacía la ciudadanía, involucra también a los médicos en proceso de formación académica, por ello, se ha recibido a estudiantes del posgrado de cirugía vascular de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (Quito) y el posgrado de cardiología de la Universidad Estatal de Guayaquil.

El doctor Soledispa manifestó ´´como líder y miembro de este equipo, he podido evidenciar los avances y logros del área, creo que el principal es haber realizado procedimientos en todos los campos vasculares y haber apoyado a todas las subespecialidades médicas que nos han pedido soporte, lo cual es la esencia de nuestro staff, mismo que está compuesto de personas jóvenes pero muy bien preparadas, que ponen el corazón en todas las acciones que realizan, anhelando el crecimiento constante del servicio y del hospital; además, hemos aportado al desarrollo de la medicina pública como soporte en un hospital de tercer nivel, también hemos generado un ahorro de varios millones de dólares al estado debido al crecimiento de Hemodinamia, realizar más de 2400 procedimientos es todo un logro, pero cuando uno analiza su complejidad, se puede ver el verdadero valor´´.

Agregó también ´´Nuestra meta es seguir mejorando en producción y en complejidad, esperamos aplicar un plan de aumento de la cobertura del servicio que nos permitirá brindar atención durante 14 horas al día (antes 8 horas por día), de esta forma se beneficiarán más pacientes propensos a padecer infarto agudo de miocardio, enfermedades cerebrovasculares, enfermedades agudas de la aorta que darán como resultado muchas vidas salvadas y muchos pacientes con funciones conservadas; entre otras metas, soñamos con desarrollar la atención de interconsultas virtuales a otras instituciones por vía digital (internet), también deseamos acreditar nuestra sala de Hemodinamia con la entidad reguladora en Latinoamérica (SOLACI, Sociedad Latinoamericana de Cardioangiólogos Intervencionistas), lo que nos permitirá formar médicos cada 3 años en la subespecialidad de Hemodinamia, y de esa forma podrán desarrollarse académicamente dentro de nuestro país´´, concluyó.

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Los quirófanos del Hospital de Especialidades Guayaquil ‘Dr. Abel Gilbert Pontón’, están dotados con tecnología de punta, lo que permite llevar a cabo intervenciones de alta complejidad, dentro de los nuevos equipos adquiridos ahora contamos con un Vitrector, mismo que sirve para hacer cirugías de retina entre las cuales mencionamos la Extracción de Aceite de Silicón Emulsionado, cuya función es extraer el aceite de silicón colocado en una cirugía de vitrectomía realizada con anterioridad, el cual debe ser removido en el plazo de 1 año, de no ser así, puede generar complicaciones como formación progresiva de cataratas o la disminución de la visión que podría evolucionar hasta la atrofia del nervio óptico por elevación de la presión intraocular.

Catherine Hernández, Especialista en Vitreorretina explica que para extraer el silicón emulsionado, se realiza tres incisiones en el ojo llamadas esclerostomías, por donde se retira de la cavidad vítrea el producto en mención,esto tarda unos 30 minutos, se empiezan a notar mejorías en la visión en 48 horas y en la primera semana se logra la mayor parte de la recuperación, sin embargo recomienda que es necesario tomar reposo de un mes cumpliendo con las indicaciones médicas respectivas para lograr los resultados esperados.  

La especialista manifiesta que previo a esta intervención, el paciente debe permanecer exento de cualquier proceso infeccioso, sea en el ojo o sistémico y mantener estables los niveles de la glucosa (80 a 130 mmol/l), debe realizarse exámenes de laboratorio y un electrocardiograma, también debe acudir a una consulta con el servicio de Anestesiología.

Esta cirugía en servicios privados de salud supera los $1500 pero en la institución es totalmente gratuita, se incluyó recientemente a la cartera de servicios de Oftalmologíadesde que contamos con el Vitrector, ya hay varios beneficiados, concluyó.

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El equipo de Cirugía Cardiovascular conjuntamente con el servicio de Cardiología Clínica e Intensiva y Anestesilogía del Hospital de Especialidades Guayaquil ‘Dr. Abel Gilbert Pontón’ realizó por primera vez un Reemplazo de Válvula Mitral, procedimiento a través del cual se llega a la válvula enferma y se recambia por una prótesis biológica o mecánica dependiendo de las necesidades del paciente, la vía de acceso a esta válvula puede ser a través de una cirugía abierta del tórax o por procedimientos hemodinámicos mínimamente invasivos (mitral clip), esta intervención es costosa, su valor puede ascender a más de $25.000 pero en la institución es totalmente gratuita.

Carlos Venegas, Líder de Cirugía Cardiovascular explica que esta cirugía fue realizada a una paciente de 58 años de edad que venía presentando problemas cardíacos desde hace dos años, después de varios estudios fue diagnosticada con una insuficiencia mitral, enfermedad que consiste en la pérdida de función de compuerta de la válvula mitral, permitiendo el paso anormal de la sangre desde el ventrículo izquierdo a la aurícula izquierda, desarrollando así un aumento de las presiones intracardiacas y de la circulación pulmonar, como resultado de este aumento de presión y dependiendo del grado de insuficiencia del paciente, puede presentarse un cuadro más severo, que en casos extremos, no sería viable una operación, teniendo como única opción un trasplante cardíaco.

El especialista explica que la paciente se encontraba en estadios iniciales de la insuficiencia, debido a su edad no presentó una disfunción de la función ventricular, pero que sin esta cirugía, su expectativa de vida hubiese sido de entre cinco y diez años; añade que a la paciente se le realizó una cirugía abierta del tórax para aplicarle una válvula mecánica, misma que dura toda la vida y le permitirá tener una buena función ventricular, esta impedirá una sobrecarga de trabajo para el corazón, evitando complicaciones que puedan ocasionar insuficiencia cardíaca.

Luego de la operación, la beneficiaria cuenta con una mayor expectativa de vida, se estima unos veinte años, ahora se reincorporará a sus actividades habituales previo a un periodo de rehabilitación cardíaca, lo que puede tomar de tres a seis meses, esto le permitirá llevar una vida normal e incluso realizar deportes, concluyó.